La belleza de la montaña de siete colores

La belleza de la montaña de siete colores

La belleza de la montaña de siete colores
 
La belleza de la montaña de siete colores

La colorida belleza de Vinicunca, apodada la montaña colorada, es un infaltable. Sin embargo, a pesar de su atractivo y el de estar tan cerca de Cusco, sigue siendo un destino fuera de los circuitos habituales. ¿Por qué? Esto se debe a la altitud y las condiciones climáticas extremas que a menudo afectan esta zona.

No por esto debes desistir. Aquellos dispuestos a hacer este viaje serán recompensados. Si estás en buena forma física y mental, no tendrás dificultad con esta caminata. El pintoresco paisaje y la montaña Ausangate que se destaca en el fondo merecen estar en su lista de deseos.

Un aspecto positivo a tener en cuenta es que en Vinicunca no hay multitudes masivas como encontrara en Machu Picchu. No necesitas luchar para tomar una foto del paisaje que te rodea. Disfrutara de una sensación de aislamiento y tranquilidad alrededor.

Y no importa a qué hora del día llegue, siempre quedará cautivado por su belleza. Desde mucho antes de la civilización Inca, la Montaña de Colores ha sido un lugar de culto y esto sigue siendo cierto hoy para los nativos. Hay un respeto innato por el panorama visto en todo lo que hacen.

Muchos se preguntan ¿qué le da a la montaña colorada su increíble gama de colores? Las superficies de color se deben a los depósitos de minerales en el sedimento. El óxido de hierro crea tonos rojizos, sulfuro de hierro, amarillo y clorito, tonos de verde. Dada la variedad de minerales podrá observar este maquillaje natural que es un espectáculo en todas las direcciones.

La visita a la Montaña Colorada se puede hacer en un día desde Cusco y también será posible comprender las tradiciones locales y su estilo de vida.

Para obtener más información sobre este maravilloso destino, comuníquese con Perú InsideOut. Aquellos que ya han tenido el placer de visitar la Montaña Colorada saben que es lo más destacado del viaje a Perú.